Encuentre Paz Interior
Naturaleza
Estar en contacto con la Madre Naturaleza nos ayuda a armonizar nuestras energías y a alcanzar la paz con uno mismo y con el medioambiente.
Existe mucha evidencia que demuestra que estar en contacto con la naturaleza es positivo para nuestro bienestar, nuestra felicidad y nuestra salud.
¿Por qué sucede eso? Simplemente porque somos una parte integral de ella.
Sentir esa plenitud y conexión permite que se extiendan las propiedades saludables de la exposición a la madre naturaleza.
Mantener una fuerte conexión con la naturaleza es tanto beneficioso para el ser humano como para la naturaleza misma porque la respetaremos y protegeremos más.
Meditación
Esta palabra puede con frecuencia impresionarnos. Pensamos que no sabemos cómo meditar, lo cual puede refrenarnos. Sin embargo, cada uno de nosotros medita prácticamente de manera diaria sin ser consciente de ello.
Estar plenamente absorto en una tarea o en algo que amamos hacer puede ser una forma de meditar.
Esta actividad nos coloca en el momento “presente”, en el cual estamos plenamente enfocados y conscientes en la acción en curso. ¡ESTAMOS MEDITANDO!
Además, cuando intentamos analizar objetivamente una situación para responder más apropiadamente a ella (lo que también puede mencionarse como inteligencia emocional), estamos meditando.
Para que nuestra conducta se base en una perspectiva objetiva, algunos de nosotros con frecuencia hacemos el ejercicio de observar una situación desde fuera de nuestra propia perspectiva, muy a menudo sesgada por nuestras emociones, experiencias e intereses personales...
No se verá la escena sin los propios ojos y comprensión, pero se hará el esfuerzo para distanciarse lo suficiente para analizar la situación como un todo y observar cómo son realmente las cosas sin agregar la perspectiva personal (emociones, juicios, intereses...) que conllevan a la subjetividad.
Observar las cosas claramente y objetivamente son algunos de los rasgos de la meditación.
Algunas creencias erróneas
La práctica de la meditación está más enraizada en la cultura de algunas personas que de otras, lo que puede conducirnos a relacionar, erróneamente y descalificativamente, a la meditación con las creencias espirituales o religiosas de dichas culturas.
En este contexto, es más probable que algunos seguidores que no meditan, no deseen hacerlo porque no se identificarían con aquellas creencias. Esta lógica divide a los seguidores de la meditación, estereotipados por algunos de esos creyentes, de quienes no son seguidores y no son discípulos de tales creencias.
En cambio, la meditación es una herramienta que permite la conexión con uno mismo, sentir más y ampliar el nivel de conciencia propio. Independientemente de la inclinación religiosa o espiritual de cualquier persona, la meditación beneficia a todos, tal como lo hace la actividad física regular.
Independientemente de la inclinación religiosa o espiritual de cualquier persona, la meditación beneficia a todos, tal como lo hace la actividad física regular.
La meditación en la escuela y en prisión
Numerosos estudios en todo el mundo, durante los últimos 40 años, han demostrado los beneficios físicos, fisiológicos y espirituales de la meditación.
Se han implementado diversas iniciativas para introducir la meditación en las escuelas, con frecuencia donde hay problemas de violencia.
Los resultados han sido muy positivos y alentadores. El principal beneficio visible ha sido siempre una importante disminución de la violencia entre los niños y adolescentes que participaron del programa de meditación.
Esta reducción de la violencia se debió principalmente a un aumento en los niveles de empatía y a la conexión más fuerte entre los niños, desarrollada por la meditación.
Este tipo de programa fue introducido también en prisión. La iniciativa comenzó en India, luego se difundió a varios países en el mundo, tales como Taiwán, Italia y Estados Unidos.
Luego de 5 clases de sesión de meditación, se solicitó a los prisioneros que meditaran 20 minutos, todos los días. Los investigadores de estos programas hallaron una reducción significativa de todos los síntomas de trauma (estrés, depresión, ansiedad e insomnio) de los reclusos.
La meditación tuvo efecto además en la recidiva y la recaída de la conducta criminal. El estudio también mostró que cuando fueron liberados, los hombres que habían practicado la meditación en la cárcel, reducían drásticamente las probabilidades de retornar tras las rejas en el futuro. Por lo tanto, la meditación tiene repercusión también en la recidiva y la recaída de la conducta criminal.
Una gran combinación
Después de realizar ejercicio físico, pruebe una breve sesión de meditación.
Esta combinación se acompaña de:
-
Disminución de los síntomas de depresión,
-
Estimulación de la actividad cerebral,
-
Reducción del nivel de cortisol, la hormona del estrés,
-
Disminución de las sensaciones de dolor,
-
Potenciación del rendimiento físico y,
-
Recuperación física y psíquica más rápida.
Una breve historia
Un estudiante preguntó a su maestro spiritual cuánto tiempo le llevaría alcanzar la más alta iluminación espiritual si meditaba 4 horas por día.
El maestro respondió: "10 años".
Luego, el estudiante preguntó: "Y si medito 8 horas por día, ¿cuánto tiempo requeriría?"
El maestro respondió: "20 años"
El estudiante no comprendió la respuesta. Preguntó por qué si meditaba dos veces más, se necesitaba el doble de tiempo para alcanzar la iluminación espiritual.
El maestro le dijo que meditar es excelente pero que si lo hiciera todo el día, todas aquellas cosas que ama hacer, así como las personas amadas, terminarían desapareciendo. Al final, la vida se le habría pasado. Todo es cuestión de armonía.
Todo es cuestión de equilibrio y armonía.
Construya una rica vida social
Rodéese de personas y aprenda a rodearse de las personas adecuadas.
Es también muy positivo tener amigos de diferentes culturas, nacionalidades y generaciones. Ello:
-
Agudiza nuestra comprensión del entorno que nos rodea,
-
Nos permite crecer más rápido, aumentando nuestro nivel de tolerancia,
-
Abre nuestra mente y nos hace más felices,
-
Nos permite conectarnos mejor con personas de diferente procedencia,
-
Aumenta nuestra empatía ante los desafíos de la convivencia en la vecindad y otros,
-
Por sobre todas las cosas, aprendemos más sobre cada uno de nosotros y luego, acerca del mundo que nos rodea.
Es esencial sentirnos respaldados y amados por nuestros seres queridos, amigos y miembros de la familia. Una vida social saludable es clave en la “búsqueda” de la felicidad.